Miro cosas y es grandioso como las mentes, mismas mentes,
crean cosas tan distintas entre ellas.
Nacemos de un mismo vientre,
en un mismo hogar,
estudiamos en un mismo colegio con iguales profesores, y aún así, somos distintos.
Cómo pueden decir que el alma de cada uno no trae consigo cosas pasadas, aprendidas, vividas... dolencias, quizá,
alegrías también.
Nuestro espíritu se vale por sí mismo, dejémoslo ser.
Ilustración: María Moor