a nadie

    En casa. Sin saber de qué voy a escribir, por qué o para qué. Creo que quiero escribir de un viaje. Interno, externo, no lo sé. Hay algo al mirarme en el espejo, algo extraño, más fuerte de lo que creía. Probar mirarse hacia adentro, desde afuera. Desde lo que uno no es, hacia lo que quizás es, quizás piensa que es, quizás quiere ser. Y no verse. No ver nada a través de los propios mas que una fuerza impenetrable, que tras diez segundos te cierra la puerta con fuerza. Hay que seguir probando hasta entender, tal vez, que ahí no estamos. Que no son los ojos las puertas del alma sino un pequeño resplandor de lo que tal vez, solo tal vez, hay.
    Y qué hay? Nada. Ideas, muchísimas, sobre todo. Son algo las ideas? Algo, no. Entonces qué somos?? No creo tener que rendirme ante la idea de ser simplemente materia. No, por algo todo esto brota. Por algo.
    El camino, eso es en lo que pienso. El camino del alma, la luz interna, la paz. Y ese camino a través de los actos, de las manos, los ojos, el cuerpo. 
    Tengo mi objetivo y es, de alguna forma, limpiar el alma y conectarme con la naturaleza que sé que es nuestra madre y cuna. Pero a su vez me contradigo de un millón de formas. Limpiar el alma? Actitudes? Sentimientos? Cómo?? De a poco, pero ya estoy grande y no recuerdo haber usado el jabón interior. O sí. Y veo que las situaciones limitan. El vivir en una casa con mi familia me priva de elecciones que haría sola, pero es que el entorno puede privarnos de avanzar? No sé. Creo que somos nosotros mismos. Creo que la idea nos aterra y siempre es más fácil sentirse acancelado, limitado. Empiezo por hoy. Hoy es mi día para crecer. Cada acción puede cambiarlo todo porque el hoy es solo una acción y la acción es el presente y el futuro, porque el futuro no es más que el presente. Presente. Presente. Hoy hoy hoy hoy hoy hoy hoy.
    No hay mañana porque mañana es hoy y el hoy ya pasó por lo tanto hay que cuidarlo. Vivirlo. Pensando solamente en el presente. no hay.
    Y allá vuelvo, de estar buscando adentro a mirar afuera. A buscar sin sentido llenar el tiempo, sólo llenarlo. Por qué no buscar cultivarlo, o sí, tal vez llenarlo, pero no por descarte. VIVIR, AIRE. LUZ. 
    Sentir los momentos, los estados, a las personas. Eso sería lo ideal, sentir, más que pensar. mas que etiquetar, como acostumbramos. 
Mejor sentir y entender.

entre nosotros

Empiezo el viaje, aún sin empezarlo

con cosas sin decir mal puestas en un frasco.

lo intento destapar y me desarmo

con el vaiven del día me olvido de intentarlo. 

Recorro entre el silencio mis estados
sintiendo un cambio hondo y poco claro.
Prefiero el cambio lento y borroneado
a seguir inmutable ante lo sano. Sano?.


Ya no quiero esta nube adentro mío,
pero tampoco quiero remediarlo.
Tan solo un pacto con mi propio instinto
entre nosotros, el mundo y los de al lado.

sólo por hoy

Como si fuera posible, al menos intentarlo.

A partir de hoy, podemos cambiar algo.

Un instante, como escuché decir.

Es solo en este instante - lo tenes para ti.

Decí que sí. Hoy. Ahora. Sólo por hoy.